Viajes a Lanzarote: Ofertas de puente, verano y más

La isla de Lanzarote es la más oriental del Archipiélago de las Islas Canarias. Tiene una población aproximada de 123.000 habitantes y forma parte de la Reserva de la Biosfera. La capital de Lanzarote es Arrecife.
La principal característica de la isla es la presencia de un manto volcánico que cubre buena parte de su superficie. La actividad volcánica producida entre los años 1730 y 1736 transformó totalmente el paisaje de la isla; numerosas poblaciones quedaron sepultadas en las cenizas y, tras nuevas erupciones en 1824, muchos pobladores se vieron forzados a emigrar. Los que permanecieron desarrollaron técnicas de cultivo especiales y pudieron subsistir. En la actualidad, el 80% de la población de Lanzarote depende del turismo y las actividades con él relacionadas.
Como una forma de preservar el patrimonio natural de la isla y a la vez hacerlo conocer al mundo a traves del turismo se crearon los Centros de Arte, Cultura y Turismo, un conjunto de siete espacios muy cuidados, donde se preserva el entorno haciéndolo a la vez atractivo al visitante. En esta tarea se destaca el trabajo creador de César Manrique, artista lanzaroteño quien buscó la armonía entre el arte y la naturaleza y fue reconocido mundialmente por sus trabajos.

Jameos del Agua

Las excursiones a las Montañas de Fuego, o Parque Nacional de Timanfaya, atraen especialmente la atención. Con una superficie de 51 km2, el parque guarda en su interior 25 volcanes, algunos aún con cierta actividad, existiendo puntos de calor que alcanzan 120° en la superficie. El paisaje lunar y surrealista es impresionante y sobrecogedor. En el restaurante El Diablo, obra de Manrique, se sirven platos de la cocina canaria preparados con el calor que emana de los volcanes...
En la cima del risco de Famara, en el municipio de Haría al norte de Lanzarote, se encuentra el Mirador del Río, también obra de Manrique. Excavado en la piedra a unos 500 m. de altitud y con grandes ventanales de cristal, permite apreciar la base del risco y unas antiguas salinas separadas por un brazo del mar llamado "El Río", del cual toma su nombre el mirador.
También en Haría, la Cueva de los Verdes es una porción de 7 km. en el llamado túnel de la Atlántida, un extenso túnel causado por la lava hace más de 4000 años. El efecto de las luces sobre los colores de las paredes constituye un espectáculo de gran belleza. En este espacio se acondicionó un auditorio, que complementa los Jameos del Agua, otra de las grandes atracciones de la isla. Los jameos son espacios circulares que se formaron como producto de un derrumbe en los túneles excavados por la lava. Dos de estos espacios fueron acondicionados por Manrique, siendo su primera intervención artística en la isla. En su interior hay un lago natural regulado por el mar, restaurante, bar y pista de baile.

Jardín de Cactus

Próximo a Arrecife se encuentra el Castillo de San José, construido entre 1776 y 1779 con la excusa de proteger la isla de ataques piratas, aunque en realidad se dice que la intención era dar trabajo a los lanzaroteños. Manrique lo restauró y acondicionó tras un siglo de abandono. Actualmente es la sede del Museo de Arte Contemporáneo.
Un paseo por Arrecife permite apreciar esta bella y serena ciudad portuaria, de rincones típicos y edificios particularmente bellos, como la Iglesia de San Ginés o la Casa de Los Arroyo, y otros emblemáticos, como el Castillo de San Gabriel y su Puente de las Bolas, en el muelle de Arrecife. Imperdibles un paseo por la calle León y Castillo y el Mercadillo Municipal, que funciona en el Parque José Ramírez Cerdá todos los miércoles.
La Casa-Museo del Campesino, con su Monumento al Campesino, es un espacio que intenta plasmar el esfuerzo de los lanzaroteños para obtener frutos de aquellas tierras áridas. Manrique restauró un antiguo conjunto de casas, las pintó de blanco, tiñó de verde los marcos de puertas y ventanas y convirtió el espacio en lugar de exhibición de elementos utilizados por aquellos campesinos.
En la zona de Guatiza y Mala se encuentran los Jardines de Cactus, el último trabajo de Manrique en la isla. Es un espectacular jardín botánico con más de 10.000 ejemplares de cactus de todo el mundo, exhibidos en una especie de anfiteatro y perfectamente identificados. Manrique restauró también el antiguo molino de viento que marca los límites del jardín.